La contaminación del aceite que debe separar el filtro, es producida tanto dentro como fuera del motor.
Cuando se inflama la mezcla de combustible y aire en los cilindros, la alta presión producida por el proceso de combustión impulsa una cierta proporción de los gases más allá de los aros del pistón hacia el cárter. Aunque no contienen abrasivo, contienen en cambio vapor de agua indeseable, hollín y combustible no quemado. La contaminación interna es causada también por diminutas partículas que normalmente producen desgaste de las partes móviles del motor.
Estas partículas son abrasivas y es necesario separarlas del aceite, pues de lo contrario continuarán circulando y produciendo más desgaste.
La fuente potencial principal de contaminantes abrasivos es exterior al motor y se encuentra en el aire que penetra a través de la aspiración de los cilindros.
Debido a los gases soplados mencionados más arriba, se formaba rápidamente lodo en los aceites utilizados hasta mediados del siglo pasado, y los filtros fueron diseñados para separar este lodo.
Estos filtros primitivos se llenaban con hilos de algodón, cáscara de trigo, madera desmenuzada y otros materiales capaces de absorber el lodo y las partículas finas de suciedad.
Con el aumento de potencia de los motores y reducción en los huelgos entre partes metálicas debido a las mejoras en los procesos de producción, los diseños de los cojinetes han variado radicalmente, y la cantidad de contaminación que pueden tolerar se ha reducido considerablemente.
Al mismo tiempo se produjo otro desarrollo importante, desde la década del cincuenta han entrado en uso aditivos químicos para modificar las prestaciones de los aceites lubricantes.
Dispersante Detergente - impide la formación de lodo al mantener inocuamente suspendidos el lodo y el carbón en el aceite.
Mejorador del índice de viscosidad - el aceite se hace más espeso en frío y menos espeso en caliente. El mejorador del índice de viscosidad reduce el régimen de cambio de viscosidad con la temperatura permitiendo un fácil arranque en frío y mejor protección contra el desgaste bajo altas temperaturas.
Depresor del punto de escurrimiento - define la temperatura más baja a la cual puede verterse un aceite para motor desde su envase. La mayoría de los aceites se fabrican con puntos de escurrimiento que son aproximadamente 10º por debajo de la temperatura mínima a la cual se espera que el aceite sea utilizado.
Aditivo antidesgaste - cubre químicamente los cojinetes y otras partes móviles, dando protección adicional contra el desgaste, aunque las partes froten levemente bajo elevadas cargas.
Inhibidor de corrosión - impide la formación de ácido y la pérdida de metal de cojinetes por acción ácida.
Inhibidor de oxidación - impide la oxidación, que suele ser un factor que contribuye a la formación de lodo y barniz.
Inhibidor de espuma - reduce la producción de espuma en el cárter. Un aceite espumoso se oxida con mayor facilidad.
Debido a estos desarrollos, la forma en que se construyen los filtros de aceite ha cambiado y hoy están diseñados con un papel resistente impregnado con resina alojado dentro de un recipiente.
El papel es de naturaleza porosa, permitiendo que el aceite circule a través del mismo, separando simultáneamente las partículas microscópicas de suciedad.
Aunque la mayoría de los contaminantes quedan detenidos en la superficie, un poco de suciedad queda atrapada dentro de las capas del papel mismo. Además, el papel está plegado para proveer una considerable área superficial de filtración dentro de un recipiente.
Estos filtros ofrecen alta eficiencia de filtrado, por lo que la mayoría de los filtros para aceites de motores actuales pertenecen a este tipo.
Cuando se inflama la mezcla de combustible y aire en los cilindros, la alta presión producida por el proceso de combustión impulsa una cierta proporción de los gases más allá de los aros del pistón hacia el cárter. Aunque no contienen abrasivo, contienen en cambio vapor de agua indeseable, hollín y combustible no quemado. La contaminación interna es causada también por diminutas partículas que normalmente producen desgaste de las partes móviles del motor.
Estas partículas son abrasivas y es necesario separarlas del aceite, pues de lo contrario continuarán circulando y produciendo más desgaste.
La fuente potencial principal de contaminantes abrasivos es exterior al motor y se encuentra en el aire que penetra a través de la aspiración de los cilindros.
Debido a los gases soplados mencionados más arriba, se formaba rápidamente lodo en los aceites utilizados hasta mediados del siglo pasado, y los filtros fueron diseñados para separar este lodo.
Estos filtros primitivos se llenaban con hilos de algodón, cáscara de trigo, madera desmenuzada y otros materiales capaces de absorber el lodo y las partículas finas de suciedad.
Con el aumento de potencia de los motores y reducción en los huelgos entre partes metálicas debido a las mejoras en los procesos de producción, los diseños de los cojinetes han variado radicalmente, y la cantidad de contaminación que pueden tolerar se ha reducido considerablemente.
Al mismo tiempo se produjo otro desarrollo importante, desde la década del cincuenta han entrado en uso aditivos químicos para modificar las prestaciones de los aceites lubricantes.
Dispersante Detergente - impide la formación de lodo al mantener inocuamente suspendidos el lodo y el carbón en el aceite.
Mejorador del índice de viscosidad - el aceite se hace más espeso en frío y menos espeso en caliente. El mejorador del índice de viscosidad reduce el régimen de cambio de viscosidad con la temperatura permitiendo un fácil arranque en frío y mejor protección contra el desgaste bajo altas temperaturas.
Depresor del punto de escurrimiento - define la temperatura más baja a la cual puede verterse un aceite para motor desde su envase. La mayoría de los aceites se fabrican con puntos de escurrimiento que son aproximadamente 10º por debajo de la temperatura mínima a la cual se espera que el aceite sea utilizado.
Aditivo antidesgaste - cubre químicamente los cojinetes y otras partes móviles, dando protección adicional contra el desgaste, aunque las partes froten levemente bajo elevadas cargas.
Inhibidor de corrosión - impide la formación de ácido y la pérdida de metal de cojinetes por acción ácida.
Inhibidor de oxidación - impide la oxidación, que suele ser un factor que contribuye a la formación de lodo y barniz.
Inhibidor de espuma - reduce la producción de espuma en el cárter. Un aceite espumoso se oxida con mayor facilidad.
Debido a estos desarrollos, la forma en que se construyen los filtros de aceite ha cambiado y hoy están diseñados con un papel resistente impregnado con resina alojado dentro de un recipiente.
El papel es de naturaleza porosa, permitiendo que el aceite circule a través del mismo, separando simultáneamente las partículas microscópicas de suciedad.
Aunque la mayoría de los contaminantes quedan detenidos en la superficie, un poco de suciedad queda atrapada dentro de las capas del papel mismo. Además, el papel está plegado para proveer una considerable área superficial de filtración dentro de un recipiente.
Estos filtros ofrecen alta eficiencia de filtrado, por lo que la mayoría de los filtros para aceites de motores actuales pertenecen a este tipo.
Norberto Sánchez
Técnico Constructor Naval
Jefe de Máquinas
Técnico Constructor Naval
Jefe de Máquinas
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