El ahorro de combustible constituye una máxima en el proyecto de cualquier tipo de barco, y el sistema de propulsión ocupa actualmente un lugar preferencial en su comportamiento ecológico y económico.
Sabemos también que el combustible de origen fósil es un bien escaso y que los gases producidos por su combustión son contaminantes de la atmósfera, por lo que debería reducirse su consumo lo más posible.
A pesar de la existencia de diversos y nuevos elementos o sistemas para la propulsión de los buques, en el mundo marino actual, el uso de la hélice sigue siendo el elemento dominante para proporcionar el adecuado empuje a un buque.
Desde que a partir del año 1933, en el que Ludwig Kort realizó una serie de experiencias para tratar de demostrar las ventajas que se podían obtener adaptando una tobera a la hélice de un buque, hasta la actualidad, el sistema de propulsión tobera-hélice ha evolucionado y hoy existen desde las toberas clásicas a las de última generación de alto rendimiento.
En forma simple, podemos decir que la función del mecanismo Hélice-Tobera es aumentar la potencia y velocidad de los barcos ahorrando combustible.
Al principio solo se empleaba en los barcos de arrastre, para ganar potencia y trabajar con el motor utilizando menos revoluciones y temperatura más baja. Ahora también se emplean para aumentar la velocidad entre un 2 y un 5%.
Hoy, los buques dragas, plataformas petrolíferas y off-shore son los que más la utilizan, por el ahorro de combustible que permite.
En el sector pesquero, existe una gran preocupación para disminuir el consumo de combustible, para el cual este factor es un alto porcentaje de sus costos operativos, y que además es difícil de trasladar esos costos en el precio del producto obtenido, el pescado.
Se ha demostrado teóricamente que su aplicación en buques de pesca por arrastre produce una mejora significativa en las cualidades propulsivas del buque.
En el siguiente link se pueden leer los resultados obtenidos de un estudio en arrastreros con Hélice en Tobera efectuado en el Canal de Experiencias Hidrodinámicas, El Pardo, por el Sr. José F. Núñez Basáñez publicado en el numero 476, febrero 1975 de la revista “Ingeniería Naval”
Ver el Informe Nº 02 en :
http://www.maquinasdebarcos.com/informes.htm
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