Un lubricante es la sustancia que permite disminuir la fricción entre dos piezas en movimiento. Sólidos, semi-sólidos y líquidos; los lubricantes han evolucionado con el paso de los años en una carrera vertiginosa de avance en procesos, desarrollo de nuevos productos químicos y productos naturales amigables al medio ambiente que permiten que la maquinaria se conserve más tiempo y consuma menos energía.
Cuando escuché “La maquinaria gira sobre una película lubricante de 10 micrones...”, quedé impactado, pensemos que 1 micrón= 0.001 mm.
La película lubricante de la maquinaria es en promedio de 10 micrones, pero en algunos elementos de la maquinaria, las dimensiones son más estrechas, llegando en algunos casos (bomba de paletas hidráulica) a películas lubricantes con espesor de décimas de micrones (0.5 micrones). ¿Cómo es posible que la máquina pueda trabajar miles de horas sin desgastarse en una delgada película lubricante?.Ahora bien, los lubricantes que hacen posible esto, no hacen todo el trabajo solos. Siempre está de por medio la mano del hombre en el proceso y en la acción de hacer que el lubricante llegue a la maquinaria.
Esto es lo que llamamos “Lubricación”.
Para conseguir el objetivo de disminuir la fricción y preservar la maquinaria, ambas partes del proceso son importantes: La selección correcta del lubricante y la actitud correcta para que el lubricante haga su trabajo.
Lo primero que aprendemos en lubricación es:
El lubricante correcto, en el momento correcto y en la cantidad correcta
Pensando en forma proactiva, a lo anterior tendríamos que agregar, con:
“La Actitud Correcta”
Entendiendo en esta actitud que el lubricante debe estar “Limpio, Seco y a la Temperatura adecuada”.
¿De qué me sirve el mejor lubricante del mundo diseñado y seleccionado adecuadamente para la aplicación de mi maquinaria, si al llenar el depósito lo contamino con partículas y dejo abierta la posibilidad de ingreso de humedad?
Seguramente este lubricante no podrá desempeñar todo su potencial y no estará cumpliendo con el objetivo de disminuir la fricción, ya que las partículas duras reemplazarán a la delgada película lubricante y ocasionarán abrasión y desgaste.
La situación opuesta también es cierta, en la que un lubricante limpio, seco y a la temperatura adecuada, no podrá proteger a la maquinaria si no ha sido seleccionado adecuadamente.
Por lo general, la mayoría de los problemas de lubricación tienen su causa raíz en la “Actitud” y no por problemas del lubricante.
Para lograr una excelente lubricación, es necesario seleccionar el lubricante adecuado a las condiciones de la maquinaria, pero también actualizar nuestros conocimientos y habilidades para efectuar la lubricación adecuadamente.
Norberto Sánchez
Técnico Constructor Naval
Jefe de Máquinas
Cuando escuché “La maquinaria gira sobre una película lubricante de 10 micrones...”, quedé impactado, pensemos que 1 micrón= 0.001 mm.
La película lubricante de la maquinaria es en promedio de 10 micrones, pero en algunos elementos de la maquinaria, las dimensiones son más estrechas, llegando en algunos casos (bomba de paletas hidráulica) a películas lubricantes con espesor de décimas de micrones (0.5 micrones). ¿Cómo es posible que la máquina pueda trabajar miles de horas sin desgastarse en una delgada película lubricante?.Ahora bien, los lubricantes que hacen posible esto, no hacen todo el trabajo solos. Siempre está de por medio la mano del hombre en el proceso y en la acción de hacer que el lubricante llegue a la maquinaria.
Esto es lo que llamamos “Lubricación”.
Para conseguir el objetivo de disminuir la fricción y preservar la maquinaria, ambas partes del proceso son importantes: La selección correcta del lubricante y la actitud correcta para que el lubricante haga su trabajo.
Lo primero que aprendemos en lubricación es:
El lubricante correcto, en el momento correcto y en la cantidad correcta
Pensando en forma proactiva, a lo anterior tendríamos que agregar, con:
“La Actitud Correcta”
Entendiendo en esta actitud que el lubricante debe estar “Limpio, Seco y a la Temperatura adecuada”.
¿De qué me sirve el mejor lubricante del mundo diseñado y seleccionado adecuadamente para la aplicación de mi maquinaria, si al llenar el depósito lo contamino con partículas y dejo abierta la posibilidad de ingreso de humedad?
Seguramente este lubricante no podrá desempeñar todo su potencial y no estará cumpliendo con el objetivo de disminuir la fricción, ya que las partículas duras reemplazarán a la delgada película lubricante y ocasionarán abrasión y desgaste.
La situación opuesta también es cierta, en la que un lubricante limpio, seco y a la temperatura adecuada, no podrá proteger a la maquinaria si no ha sido seleccionado adecuadamente.
Por lo general, la mayoría de los problemas de lubricación tienen su causa raíz en la “Actitud” y no por problemas del lubricante.
Para lograr una excelente lubricación, es necesario seleccionar el lubricante adecuado a las condiciones de la maquinaria, pero también actualizar nuestros conocimientos y habilidades para efectuar la lubricación adecuadamente.
Norberto Sánchez
Técnico Constructor Naval
Jefe de Máquinas
No hay comentarios :
Publicar un comentario